“Santa Cruz toca la puerta” (La cuestión cruceña, FES, 2023) y quiere hacer política a partir de su clase media propietaria, liberal y republicana, en contrastación con el nacionalismo popular del MAS, dice Manuel Suárez, diputado del MNR y presidente de la Comisión de Ética que propició la expulsión de Evo Morales de la Cámara de Diputados (2002), secretario privado del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada (2002-2003), vicecanciller y responsable de estudios de opinión de la presidenta Jeanine Áñez (2019-2020). También asesor de Branko Marinkovic, alguna vez pensó que el gran acuerdo entre lo nacional popular y el inversionismo empresarial, ente occidente y oriente, debía darse entre Evo y Branko, en su momento presidente del Comité pro Santa Cruz, acusado de conspiración en el primer tramo gubernamental del Movimiento Al Socialismo (MAS), lo que forzó al cruceño croata a refugiarse en Brasil por casi una década para luego retornar como ministro de Economía del gobierno de Áñez.
Suárez escribe su lectura-propuesta acerca de una pretendida Santa Cruz de nuevo siglo desde la experiencia de la militancia partidaria y el asesoramiento a poderosos empresarios, por lo que pensar que nos encontramos con un texto resultante de una vocacional vida académica sería una inexactitud. En buenas cuentas se trata del texto de un operador político que ha formado parte de la estructura de la democracia de pactos en la que el jefe histórico del MNR, Víctor Paz Estenssoro, se sometió a las condiciones puestas por el Gral. Hugo Banzer Suárez para cogobernar en dictadura primero (Frente Popular Nacionalista, FPN) y luego recibir el apoyo del mismo Banzer con el Pacto por la Democracia (1985) a través de un incondicional apoyo de su partido fundando, en 1979, Acción Democrática Nacionalista (ADN), lo que permite concluir que estamos frente a un político de adscripción Paz Estenssorista-Banzerista y no otra cosa: Los hijos y nietos de los jerarcas de las dictaduras y el neoliberalismo provenientes del MNR, FSB y más tarde de ADN y el MIR, son predominantemente herederos de una cultura política basada en el supremacismo y el anticomunismo construido durante la Guerra Fría, clasificando al colla y al indio como “bestia humana”, tal como lo afirmara en su momento Rómulo Calvo, el muy clasemediero y anterior presidente del Comité pro Santa Cruz, lo que significa que intenta clasificar a una clase media sin olores ni colores ideológicos solamente como republicanas y liberales de la expansión inmobiliaria y agroexportadora, significa presentarlas como desprovistas de memoria con antecedentes históricos, político partidarios y orígenes hacendales y terratenientes.
Si no se examinan las rutas críticas de dos cruceños fundamentales de nuestra historia contemporánea como Banzer y Percy Fernández (MNR), el hacedor de la Santa Cruz de la Sierra moderna (seis gestiones, 15 años como alcalde), significa incurrir en una notoria omisión en el análisis riguroso de lo histórico político de la “locomotora de la economía boliviana”, y eso es lo que precisamente hace con su texto Suárez, en el que cita muy al pasar a varios personajes de la vida pública, pero no ejercita una imprescindible mirada profunda acerca del banzerismo y el movimientismo Paz Estenssorista y el de varios de sus actores de última data, comenzando por Luis Fernando Camacho, al que algún lambiscón calificó en tiempos de campaña electoral como el “nuevo Banzer”, cuando a estas alturas se puede afirmar que el General es una figura de dimensión histórica participando e influyendo en la política boliviana durante medio siglo, y Camacho es apenas un agitador de rotondas con una fijación de odio antimasista que manipuló astutamente con la Biblia en mano una movilización de esas clases medias propietarias y de “sus cambas” para manifestarse contra el prorroguismo evista. Suárez opone el republicanismo liberal al nacionalismo centralista, cuando en realidad Paz Estenssoro (Revolución del 52) y Banzer (Golpe de Estado del 71) fueron nacionalistas de derecha en la política, y capitalistas de Estado y neoliberales privatizadores en la economía, en las distintas fases de sus carreras políticas.
Las categorizaciones de Suárez en su tocada de puerta para que las clases medias cruceñas ingresen a la política boliviana como si no estuvieran adentro, son esquemáticas y no contienen elementos informativos acerca de las mutaciones temporales de sus actores. La política se hace con políticos, con estructuras partidarias que contemplen, por ejemplo, esa Alianza de Clases propugnada por Guevara Arce en la tesis de Ayopaya (1946) que el autor cita, y fundamentalmente con liderazgos como el de Banzer o Percy Fernández. Santa Cruz necesita líderes de carne y hueso con el necesario talento político y visión de mundo para armonizar la patria chica con la plurinación, como lo hiciera el General, padre espiritual del golpismo alentado por las clases medias republicanas y liberales de Santa Cruz en 2019, a las que seguramente Suárez considera pertenecer.
Entre las Fernandas del cine brasileño hay 26 años de travesía y dos películas que confluyen en la carrera del director Wálter Salles. En 1998, Fernanda Montenegro encabezó el elenco de “Estación Central” que le valió a la actriz una nominación para el Oscar. Seis años después, Salles volvió a la carga con “Diarios de motocicleta” (2004) con la que “Al otro lado del río” del uruguayo Jorge Drexler se alzó con la estatuilla hollywoodense a mejor canción original que en lugar de ofrecer palabras de circunstancia en el momento de recibir el premio, se permitió la travesura de cantar su composición, luego de que los organizadores decidieran que la interpretación de la misma estaría a cargo de Carlos Santana y Antonio Banderas. Desobediente con la academia de la industria cinematográfica, Drexler puso en evidencia por qué podía ganar la música de una película referida a los viajes que el Che Guevara había realizado en carreteras sudamericanas en 1952.
Montenegro nominada en 1998, Drexler, oscarizado por su canción en 2004-5 y finalmente, por su interpretación en “Aún estoy aquí”, la otra Fernanda (Torres) hija de la Montenegro, era también nominada a mejor actriz por su rol protagónico y que le ha significado al cineasta carioca, premios internacionales entre los que resuena por su impacto comercial y mediático, el Oscar a mejor película internacional, que antes se le llamaba oficialmente “película extranjera”.
Walter Salles proviene de una acaudalada familia de empresarios banqueros (Unibanco, Itaú), pero que, a contracorriente de la predominante ideología del mundillo de los ricos, sus películas son de una clara e inequívoca orientación progresista. Un comunista. Un zurdo diría los exministros Arturo Murillo Prijic y Branko Marinkovic. En una declaración hecha al diario El Mundo de España, Salles ha dicho que cuando la derecha llega al poder “lo primero que ataca es a la educación pública y a la memoria.”
Precisamente, “Aún estoy aquí” es una película basada en la memoria del activista político Rubens Paiva (Selton Mello), detenido, desaparecido y asesinado por la dictadura brasileña en 1971, memoria escrita (e interpretada en la película) por Marcelo, hijo de Rubens y de Eunice Facciola Paiva (Fernanda Torres) que luego del apresamiento político de su esposo se convirtió en una prominente abogada defensora de los derechos humanos en Brasil.
Hasta aquí, cualquier reaccionario de los que amenazan como moscas por calles y plazas estaría gustoso de pensar que se trata de una película-panfleto, pero cuando uno se interna en la narración de Salles, sabe que está asistiendo a la historia de una familia que festeja la vida cotidiana en una sencilla casa situada a pocos pasos de la playa de Copacabana. “Aún estoy aquí” es una propuesta con fuerte base de información política e histórica, pero pone el foco en la personalidad de Eunice, que mientras su esposo hace activismo por teléfono desde su escritorio y al mismo tiempo sabe ejercer de padre amoroso y presente, maneja con lucidez maternal las relaciones con sus hijas e hijo que transitan entre la adolescencia y la juventud, en tiempos compulsivos en que sobrevuela sobre nuestras cabezas el Plan Cóndor.
De la luminosidad diaria, las risotadas a las horas del almuerzo, los tiempos compartidos junto al mar con la elección de una fotografía que nos remite a los viejos álbumes de hace por lo menos medio siglo donde quedan registradas imágenes de tiempos felices, la película pasa súbitamente hacia lo sombrío y oscuro determinado por la presencia paramilitar en la casa de los Paiva, primero para llevarse a Rubens y luego para vigilar a Eunice e hijos y así evitar posibilidades de desesperados pedidos de socorro. El tiempo de la angustia y la impotencia cierra con la detención de Eunice a la que se incomunica para masajearla psicológicamente hacia la resignación de que su compañero nunca más retornará, resignación que se convertirá en fortaleza para aceptar la fatalidad con entereza y hacer de la resistencia emocional una forma de vida cotidiana.
Transcurridos los peores momentos de la crisis familiar, cuando un periodista de la revista Placard les pide a Eunice y familia que pongan caras de circunstancia y que “no sonrían” para ilustrar la cobertura sobre el asesinato de Rubens, Eunice-Fernanda Torres les dice a hijas e hijo que hagan lo contrario: ellos no conciben, a pesar del dolor, una vida capturada por los rencores y las amarguras. El recuerdo amable del padre es más poderoso que la impotencia de haberlo perdido por sus convicciones y compromisos con las causas de la democracia y la libertad. Tristeza nao tem fim, felicidade sim cantaron Vinicius de Moraes y Tom Jobim: con “Aún estoy aquí”, Wálter Salles respaldado por las Fernandas, madre e hija, Montenegro y Torres, acaba de desmentirlos.
Juan Villca: “Evo impuso la candidatura de Lucho para perder”
Este texto forma parte de la investigación periodística “Hasta aquí llegamos Evo” (Sabotaje contra el gobierno de Luis Arce) de Julio Peñaloza Bretel, próxima a publicarse.
El pasado 19 de agosto (2024), fecha de recordación del golpe de Estado perpetrado por el Cnl. Hugo Banzer Suárez en 1971, conversamos con Juan Villca, en la actualidad Viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales para conocer, desde adentro, en qué había consistido la resistencia contra el gobierno golpista de Jeanine Áñez y cómo se definieron las candidaturas del MAS-IPSP para las elecciones que finalmente se realizaron el 18 de octubre de 2020.
En aquél tiempo, Villca asumió la conducción de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB) en reemplazo de Jacinto Herrera que decidió escapar hacia Paraguay y de esa manera eludir la cacería desatada por el Ministro de Gobierno, Arturo Murillo. He aquí la palabra del dirigente campesino en primera persona:
“Yo había regresado de Oruro y era necesario instalar una mesa de diálogo con Áñez con el propósito de detener la violencia.”
“En su momento reflexionamos sobre lo que estaba aconteciendo con el país y llegamos a la conclusión de que así como estábamos nos iban a barrer. Una semana antes del golpe ya sabíamos lo que pasaba.”
“El 03 de agosto (2019) cuando realizamos una marcha ya notamos que la Policía se estaba parcializando y arremetió contra nosotros.”
“Ya se habían producido amenazas de mineros cooperativistas de Potosí y universitarios de Sucre que querían tumbar al gobierno.”
“Cuando se produjo un bloqueo en Oruro me organicé con los Alcaldes. Evo había preferido escuchar a invitados y no a sus organizaciones dispuestas siempre a defenderlo.”
“Con este panorama el escenario era negativo con bases que no querían salir a las calles. Tuve que hacerlo con los Alcaldes orureños para hacer bloqueos.”
“Empezaban a llegar flotas con universitarios de Sucre. Quemaron la casa de Esther Morales (hermana de Evo).”
“Cualquier letrero con la imagen de Evo era quemado, se apedreaban viviendas sociales y eso provocó la reacción de la gente de Caracollo.”
“Los universitarios que habían llegado de Sucre, en coordinación con la Policía, se enfrentaron contra campesinos.”
“En Machacamarca y Huanuni el gobierno había perdido el control de la Policía mucho antes de los amotinamientos.”
“Mi gente era de la tercera edad, muy mayor, por eso necesitábamos retroceder para volver a atacar. No hubiéramos aguantado ningún enfrentamiento porque en nuestras filas se encontraban luchadores de los 70 y 80. A propósito de esta experiencia siento que las nuevas generaciones no están preparadas para los enfrentamientos.”
“Militares, policías, fiscales, jueces y periodistas querían que todos participaran del diálogo. Hermano Juan usted dirija me pedían.”
“Nos estábamos quedando solos, se fueron levantando los bloqueos. Oruro y Cochabamba fueron los últimos en hacerlo.”
“En Challapata, Vinto, Llallagua, Huanuni la Policía llegó con tres contingentes. Nos advirtieron que iban a intervenir los bloqueos.”
“Si todos habríamos estado luchando podíamos resistir, pero varios departamentos ya habían levantado los bloqueos.”
“En todas las trancas se instalaron tanquetas. Cualquier indicio indígena campesino implicaba detención inmediata.”
“Circulaba una lista negra del Comité Cívico de Oruro con la que los fiscales empezaban a operar.”
“Cuando Evo salió del país, los paramilitares y los parapoliciales nos asediaron. Tuvimos que reorganizarnos en Oruro.”
“Los ejecutivos estaban desorganizados. Me inventé la figura de los comandantes provinciales, departamentales y nacionales.”
“Definimos las cosas como orureños.”
“Nosotros cumpliremos levantando los bloqueos, pensábamos. ¿Qué ganamos enfrentándonos?”
“Todos bajaron la guardia, nos quedamos bloqueando solo Cochabamba y Oruro y levantamos el conflicto.”
“Pondero mucho a mis comandantes por promover la no persecución del gobierno.”
“De regreso a La Paz por Patacamaya, Jacinto Herrera, nuestro Ejecutivo, continuaba refugiado en Paraguay, mientras que Nelson Condori nos traicionó, recibió maletines de dinero de Camacho, conducta que dio lugar a que le quemaran su casa. En la actualidad anda dando vueltas…”
“Teodoro Mamani fue al diálogo. Yo hablabla con todos y por eso decían que era el único que los cohesionaba. En ese momento Henry Nina (Interculturales) y Segundina Flores (Bartolinas) fueron considerados traidores porque se fueron al diálogo con el gobierno de Áñez.”
“A la reunión con Áñéz decidí no ir. Me encontraba en resistencia, en plena lucha. En esos momentos se produjo la quema de la casa del Gobernador (de Oruro), Victor Hugo Vásquez.”
“Fue un tiempo en que el Pacto de Unidad se fortaleció. A excepción de la CIDOB a la cabeza de Pedro Vare que fue tumbado por su segundo en jerarquía, Gregorio Queti, se fue con Áñez. Segundina Orellana y Guillermina Kuno de las Bartolinas se mantuvieron. También estaba con nosotros Pelagio Condori que hoy es Viceministro de Descolonización.”
“Cuando recuperamos el Pacto de Unidad habían pocas personas como Juan Carlos Huarachi y Boris Villanueva de las organizaciones de la COB. La mayor parte de su directorio desapareció”
“Las afiliadas a la COB, adoptaron una posición de distancia en un momento en el que Áñez y su gobierno buscaban partir las organizaciones.”
“Un segundo momento de la resistencia popular se produjo cuando Evo ya estaba fuera de Bolivia cuando realizamos un Ampliado en el Coliseo de la Coronilla (Cochabamba) y comenzamos a trabajar para recuperar la democracia.”
“En el Ampliado, las organizaciones como el Magisterio dijo terminantemente no queremos saber desde el Vicepresidente para abajo. Son traidores. No supieron cuidar al Presidente.”
“Asistí a una reunión con Evo Morales en Buenos Aires junto a Henry Nina, Segundina Flores y otros dirigentes. La reunión que debía durar no más de quince minutos se convirtió en cuatro días de catarsis. Evo mostró su enojo preguntando ¿Qué están haciendo aquí? ¿Qué hacen en Argentina?”
“Evo estaba molesto por la decisión del Ampliado en Cochabamba que desconoció al entorno gubernamental desde el Vicepresidente para abajo. Lo encontré muy mal, transformado.”
“Nos encargamos de hacerle saber a Evo los errores que había cometido y que pasaban por su falta de sinceridad y predisposición con nosotros. Le recordamos que el 05 de noviembre organizamos una marcha en La Paz que tenía la cabeza en San Francisco y la cola en El Alto. Fue entonces que le dijimos: Compañero Evo, los compañeros llegaron para quedarse a defender el Proceso de Cambio, nos quedaremos en La Paz hasta tumbar el intento de golpe a lo que Evo nos contestó que estaba de acuerdo, pero que lo analizaríamos después de la concentración, cosa que nunca sucedió.”
“Juan Carlos Huarachi de la COB y representantes de la Federación de Mineros como Orlando Gutiérrez, David Choque, Secretario General de Huanuni, el de Colquiri y los dirigentes que conforman la vanguardia de los trabajadores de Bolivia, comentaron que Evo los había desmovilizado a todos, que se reunió con los dirigentes por separado, varios de los cuales llegaron a decir que el Presidente les pidió que se replieguen, pero antes habría negociado su salida negociando con la derecha.”
“Cuando ya todo estaba perdido Evo nos dijo que la Policía iba a controlar todo.”
“Evo está ejecutando un autogolpe decían los dirigentes, recordando que el Ministro Carlos Romero había sido una especie de guía de Luis Fernando Camacho en su llegada a La Paz y que Gabriela Montaño decía junto a la Ejecutiva de las Bartolinas que había que recibir a Camacho.”
“Cobardes y traidores los llamaron los dirigentes.”
“Todo comenzó con Andrónico que sugirió reunirnos con Áñez por pedido de Evo, con el ministro (de Comunicación). Manuel Canelas fue quién estableció el contacto por instrucciones de Evo.”
“Evo Morales fue el factor determinante para la caída de el mismo.”
“Los ministros de Evo trataban mal a las organizaciones, ese entorno se convirtió en una rosca. Recordemos que los dineros del Fondo Indígena Originario Campesino (FONDIOC) iban a manos de los Alcaldes, no de las organizaciones.”
“La Coordinadora Nacional para el Cambio (CONALCAM) era una fachada, nunca funcionó, sirvió solamente para consolidar el culto a la personalidad de Evo.”
“Si la resistencia popular se hubiera consolidado era inevitable una guerra civil y se hubiera producido un baño de sangre.”
“Estoy aquí en representación de las organizaciones para cuidar el Proceso y no permitir un nuevo Golpe de Estado”.
“Ahora son todos nuevos, no hay infiltrados, ni pititas, ni evistas…somos por lo menos medio millón de bolivianos y bolivianas…el mayor porcentaje de las organizaciones están con Luis Arce”.
“Las grandes cosas positivas, orgánicas, que le han pasado a Luis Arce se han armado desde aquí”.
“En su momento Evo me preguntó ¿por qué te peleas conmigo? Fue a propósito del Ampliado que había decidido que el binomio del MAS-IPSP estaría conformado por David Choquehuanca y Andrónico Rodríguez, decisión que no admitía objeciones y que nos permitía garantizar la unidad.”
“En el Ampliado de Huanuni, Choquehuanca obtuvo el apoyo mayoritario para ser candidato presidencial.”
“Te van a imponer a Choquehuanca le advirtió Juan Ramón Quintana a Evo.”
“Quintana llamaba pachamamista a Choquehuanca y decía que era agente de los gringos.”
“Podemos generar otro caudillo, pero la historia nos juzgará por individualistas y ególatras. Frente al individualismo debe imponerse el liderazgo comunitario y en este contexto se repitió el criterio de que no queríamos a García Linera y a quienes estaban debajo de el.”
“Evo nos dijo que esos ministros habían demostrado más lealtad que los dirigentes. Recordó que cuando se quiso aplicar el gasolinazo (2010), García Linera le recomendó viajar a Evo y que el daría la cara.”
“Para no pelearse con el Pacto (de Unidad), decidió prescindir de la visibilidad del entorno.”
“En Buenos Aires, Evo coordinaba con su entorno y por otro lado se reunía con el Pacto (de Unidad), decía que era el momento de la clase media, nos llamaba y decía que ustedes los campesinos sumaban un 21 por ciento y que en las elecciones (2020) no íbamos a ganar.”
“Con un candidato de clase media llegamos al 44 – 45 por ciento, no ganamos, afirmaba Evo.”
“Evo en su preocupación me dijo que buscara a los mejores candidatos supraestatales, para senadores y diputados, para la campaña internacional. Con el cálculo de que Mesa ganaría la elección, los diputados y senadores debían estar en la Asamblea Legislativa para boquearle y aprobarle nada, mientras desde las calles junto a las organizaciones la idea era generar un gran bloqueo para desprestigiar al gobierno, de esa manera Evo calculaba que Mesa no duraría ni un mes en el gobierno.
“A todo esto contestamos: Hermano Evo estás mal, Bolivia está en otra.”
“Evo fue contundente cuando dijo que Mesa iba a ser presidente y como no va a aguantar, vuelvo y nuevamente voy a ser Presidente.”
“Mientras tanto, Jeanine iba cometiendo errores catastróficos con la salud en el manejo de la pandemia.”
“En Huanuni, el Ministro de Obras Públicas, Iván Arias, culpó de falta de organización a las autoridades locales…cuando vió que la reunión se estaba transmitiendo por algún medio de comunicación pidió que esta se cortara. Arias escapó de la reunión junto a Huarachi que también es de Huanuni a quién increpamos y a la gente que había llegado con el, tratándolos de golpistas.”
“Los trabajadores estaban sin salarios varios meses, la economía estaba paralizada, no había plata para nada y las tanquetas estaban por todas partes.”
“Estaban en el plan de quebrar las empresas del Estado. Nos cortaban las señales de ENTEL controladas desde Santa Cruz.”
“En el gobierno de Evo tuvimos muchos inflitrados de la derecha que facilitaron el golpe de Estado. Evo nunca hizo caso a las recomendaciones de las organizaciones.”
“En lo político tuvimos mucha gente desclasada. Ya mencioné a Nelson Condori que recibió a Camacho e hizo una paralela de la CSUTCB al servicio de Áñez.”
“No tocaron a las Bartolinas, ahí nos atrincherábamos, cuando había para comer, comíamos, cuando no había, nos aguantábamos…el que escribía todo lo que iba sucediendo era yo.”
“A Diego Pari le dijimos que era un traidor porque había negociado a espaldas del bloqueo nacional por orden de Evo la realización de elecciones para el 18 de octubre, y no como se había decidido orgánicamente para el 06 de septiembre.”
“La gestión de Áñez estaba destrozando el país…En agosto de 2020 dos los dirigentes del magisterio de Oruro fueron a sacar plata al banco para la marcha hacia La Paz que teníamos previsto organizar con petardazos y cacerolazos, pero fueron detenidos al salir del banco para ser conducidos a la cárcel”
“Unos estaban cobardemente encerrados y otros valientemente en la calle. Evo se oponía a la movilización, un día antes de que se iniciara, sacó a las seis federaciones (de cocaleros) del Tropico para cruzar al Pacto (de Unidad), no quería que hiciéramos marcha, pero paralelamente instruía a su gente a marchar. Su idea era utilizar ala gente del trópico y neutralizarnos.”
“El enemigo principal de Evo era el Pacto de Unidad, no la derecha. El traidor es el Pacto decía, sólo porque no le hacía caso.”
“Lo primero que pidió Evo cuando llegamos al gobierno fue mi destitución como Viceministro (de Coordinación con los Movimientos Sociales).”
“En reunión en Buenos Aires, Luis Arce demostró una notable lealtad principista con Evo Morales. Me decía: soy soldado del proceso de cambio. Me quedaba claro que nuestro candidato era como carne de cañón…”
“Evo quería desde el principio que perdamos, está llevando a la desaparición del Instrumento Político, pensé.”
“Yo le preguntó a Lucho ¿quieres ser Presidente de Bolivia o no?”
“Evo impuso la candidatura de Lucho para perder…llegamos a La Paz y nos reunimos en la sede de las Bartolinas. Luis Arce llevaba una lista de leales y traidores hecha por Evo.”
“Ninguno de esos supuestos leales le abrió la puerta a Lucho. Nadie quería dar una oficina para la Casa de Campaña, ni acompañarlo.”
“En su momento Lucho, con gran honestidad dijo, he venido a reunirme con los traidores.”
“A Lucho le dimos el consejo de que viajara por los nueve departamentos, que conociera toda Bolivia para que sacara sus propias conclusiones.”
“Con gran claridad, Lucho llegó a una tremenda conclusión al decir que no podía creer los que les hemos hecho a nuestras organizaciones.”
“Ya en plena campaña Evo hizo cosas como la de sacar de su oficina en Buenos Aires a los dirigentes para imponer con su dedazo las candidaturas.”
“Evo utilizó a la CONALCAM y a las codelcames (coordinadoras departamentales por el cambio) para imponer sus decisiones. El fue quién impuso a Lucho y su actual bancada evista, cuando en Ampliados como los de Huanuni y El Alto se había decidido que el binomio era David Choquehuanca – Andrónico Rodríguez. Recuerdo que para cruzarnos, el Gobernador del Beni, Alex Ferrier, llevó una flota de benianos hasta Argentina presentándolos como si fueran representantes de las organizaciones sociales.”
“En conferencia de prensa, Evo tenía que anunciar el binomio con el criterio de no pelearse con el Pacto de Unidad que quería a Choquehuanca-Rodríguez. En esa línea sentenció que iban Arce con Choquehuanca para no pelearse con nadie.”
“Le dijimos a Evo que diera la cara , que no era la decisión de las organizaciones. Finalmente decidió no dar la conferencia de prensa, se puso a llorar y se quejó de que lo estábamos dejando solo.”
“El pueblo no está decidiendo, estás decidiendo vos le dijimos a Evo…un par de dirigentes se quebraron a llorar.”
“Convocamos a un Ampliado Nacional de Emergencia, algunos dirigentes fueron desconocidos.”
“Choquehuanca dijo con claridad Evo no me quiere, me va a vetar, que vaya Lucho.”
“Yo dije: No me dividen el Instrumento Político por la Soberanía de los Pueblos (IPSP). En ese Ampliado hicimos aprobar el binomio Lucho-David. Para anunciarlo se decidió un cuarto intermedio en el que convencimos a todo el MAS-IPSP.”
“Orlando Gutiérrez de la Federación de Mineros tenía la idea de ser candidato a la Vicepresidencia y formar otro partido. Yo me tuve que pelear diciéndoles que no permitiría que nos dividan.”
“Andrónico renunció a su postulación y felicitó al binomio Lucho-David. “
“Andrónico me llamó para decirme que si la gente quería, el podría seguir de candidato. Le contesté que el solito se había bajado del carro. Junto con Evo, Andrónico armó una agenda con la derecha.”
“Para entonces, Jacinto Herrera, nuestro Ejecutivo de la CSUTCB, había regresado del Paraguay y en ese momento la neurona del calendario electoral era Salvador Romero, Presidente del Tribunal Supremo Electoral que con pretextos técnicos había pospuesto siete veces la realización de elecciones…teníamos información de tres vocales, teníamos información de adentro.”
“Se organizó la movilización más grande de la historia de Bolivia desde Pando hasta Tarija.”
“El total nacional para el Bloqueo Nacional de Caminos ascendía a la cifra de 500 mil personas con más de 200 puntos de bloqueo. Fue el bloqueo más grande de la historia de Bolivia. Entonces, los mineros a la cabeza de Orlando Gutiérrez no pudieron movilizar a su sector. Sólo vi a Huarachi de la COB y a los mineros de Huanuni, que bloquearon en el cruce de Machacamarquita junto a los campesinos de Dalence y del Norte Potosí.”
“Después del conflicto mi fui a hacer campaña con Luis Arce.”
El bicentenario no debe ser solo una celebración, sino una oportunidad para dejar de esperar y empezar a construir, como nación, el futuro que anhelamos.
El 8 de marzo no solo es una fecha de conmemoración, sino también de reivindicación. En ‘Los Hombres Me Explican Cosas’, Rebecca Solnit expone cómo no escuchar a las mujeres perpetúa la desigualdad.
Cuando Rafael Archondo Quiroga (RAQ) publicó hace muchos años que una dupla electoral con posibilidades de éxito podría ser Juan del Granado-Ernesto Suárez no se advertía que solo estaba opinando como un hijo de vecino cualquiera, que su idea no era el resultado de los conocimientos que le otorgaron sus años universitarios para hacer prognosis. Transcurrido el tiempo, quedó claro que se trataba nada más que de una ocurrencia o, como ahora dice, de un comentario. No son bromas de mal gusto como las que resultan de los textillos feisbuqueros de este personaje que se ha ganado el apelativo de francotirador de Puebla (México), por haberse dedicado a disparar desde lejos contra todos los que le caen mal, los que no encajan en su lista de amiguetes que le palmotean la espalda para hacerle creer que es estupendo y que ahora es fan de María Corina Machado y toda su corte de reaccionarios, enemigos de la Venezuela de Maduro.
¿Estará RAQ entre los 6.000 operadores mediáticos que se quedarán sin los sobres que Usaid, a punto de desaparecer, militantes del periodismo “independiente” para seguir sustentando una organización que podríamos llamar “La mentira organizada”? Éste es, como los suyos, un comentario, pero en forma de pregunta, no otra cosa. Por siaca.
Cuando RAQ mete las gambas, lo hace con éxtasis de autocontemplación, esta vez como aplaudiéndose frente al espejo para celebrar una nueva teoría que le permita, vanamente, intentar salir del paso. Dice que cuando afirmó que el binomio del MAS estaría conformado por Eduardo y Andrónico Rodríguez estaba nada más haciendo un comentario, que eso no tiene por qué ofender a nadie y que si el expresidente de la transición 2005-2006 no quiere exponerse a ser fotografiado debería encerrarse entre cuatro paredes de modo que sus reuniones “secretas” no queden en evidencia.
En esa misma línea argumental inscrita en la nueva “teoría del comentario”, se puede decir que cuando un puñado de fiscales del gobierno de facto presidido por Jeanine Áñez pretendía extorsionar al propietario de este diario, para arrebatárselo a través de un apriete judicial (año 2020), La Razón quedaría en manos de un par de golpistas a cambio de inversión cero. De esa nueva composición accionaria emergería RAQ que andaba husmeando en reuniones de este diario para incidir en su desestabilización y para buscar convertir su sueño de ser director de este medio. Ojo, no hay por qué enojarse, utilizando la misma nueva teoría que el personaje acaba de inventar, se trata de un comentario y, por lo tanto, tiene que estar todo bien sin lugar para rencores.
Corresponde ahora contar la historia tal como fue: La imagen registrada por el militante del Movimiento Sin Miedo y Sol.bo Edwin Herrera lleva el siguiente texto: “Las tres corrientes del MAS en un café. Sebastián Michel, embajador de Luis Arce; Eduardo Rodríguez, cercano a Evo Morales; y Diego Pary, exembajador de Choquehuanca fueron fotografiados conversando en un local de la avenida Arce de La Paz. De fútbol, seguro que no fue”. Para averiguar lo verdaderamente sucedido, se imponía acceder a versiones de primera mano que, en este caso, permiten establecer que jamás se trató de una reunión concertada de quienes fueron “capturados” por Herrera.
A continuación, Asuntos Centrales, programa de radio Marítima de Santa Cruz, convocó a Herrera y a RAQ para hablar de la foto como si se tratara de un hallazgo, cuando en realidad no pasaba de una anécdota. Asuntos Centrales publicó posteriormente (con la foto de RAQ): “Periodista asegura que el binomio del MAS será Rodríguez-Rodríguez”, quien pretende justificarse de la siguiente manera: “Lo que usted ve acá es un comentario. La palabra de una persona identificable y responsable. No es una noticia por ningún lado que se lo mire” y el programa de Marítima deslinda responsabilidades: “El periodista Rafael Archondo interpretó que la foto de Sebastián Michel, Eduardo Rodríguez y Diego Pary sugiere que el binomio del MAS estará compuesto por Eduardo Rodríguez Veltzé y Andrónico Rodríguez.”
Los expertos en noticias falsas y cultores de posverdades encabezados por RAQ recibieron la siguiente respuesta de Rodríguez Veltzé: “No fui, no soy, ni seré candidato en las próximas elecciones. El Código Nacional de Ética Periodística (2012) prevé que los ‘periodistas’ deben informar con veracidad y contextualizando contenidos, diferenciándolos claramente de sus propios comentarios, respetando la intimidad de personas públicas y o privadas, sin invadir su privacidad con imágenes no autorizadas ni especulando sobre sus contenidos.”
Sobre fotografías y persecución política RAQ, tiene experiencia. Algunos de sus amigos las utilizaron para colaborar con el régimen represivo de Arturo Murillo cuando andaban intentado instalar en noviembre de 2019 que lo que habíamos vivido no fue un golpe de Estado, sino un fraude. Queda claro que para el comentador todo es fotografiable, aunque el precio sea el uso indebido de imagen contemplado en el art. 21 de la CPE y en el art. 16 del Código Civil.
El caudillismo le ha costado a Bolivia la instalación de dictaduras militares durante 18 años, a partir de 1964, cuando el Gral. René Barrientos Ortuño derrocó a su presidente Víctor Paz Estenssoro, líder de la revolución del 52 que quería seguir y seguir en el poder, pero con una notable debilidad por los militares que le pagaron mal. Primero fue Barrientos, su vicepresidente, que le dio una primera patada en el traste, luego le tocó al Gral. Banzer que le dio una segunda patada en 1974, expulsando al MNR junto con la Falange de la estructura gubernamental dictatorial. A su vez, Banzer fue un caudillo uniformado (siete años de dictadura, tres de gobierno democrático) que lejos de haberlo divisado, se convirtió en el referente histórico ideológico para perpetrar el golpe de Estado de 2019. El último caudillo es Evo Morales, otro con vocación prorroguista y recibió, también una patada por la retaguardia por el Alto Mando, a la cabeza de los generales Kalimán y Terceros, a los que había mimado y privilegiado durante casi catorce años.
En plan autodestructivo —creía que eso le facilitaba un retorno exprés al poder— Morales ha logrado debilitar in extremis al gobierno de su propio candidato de 2020, Luis Arce Catacora, hasta el punto casi terminal de la destrucción del MAS-IPSP, que en marzo enfrentará el mayor desafío de su devenir partidario consistente en recoger del suelo los destrozos para intentar convertirlos en piezas de un nuevo puzzle, y así generar una recomposición partidaria institucional que viabilice un binomio para las elecciones de 2025.
Luis Fernando Camacho, el principal paramilitar del golpe que llevó a Jeanine Áñéz a la presidencia, dice continuamente desde Chonchocoro que el MAS está acabado, que ya no tiene nada que ofrecerle al país, que ha destrozado la economía del país. Si fuera como dice el individuo que perpetró un golpe de Estado con la ayuda de su papá, no habría la mínima necesidad de pensar en una candidatura de unidad y tampoco en encuestas convertidas en primarias para decidir quién puede enfrentar al partido de gobierno que, con la interrupción de 2019-2020, lleva gobernando Bolivia durante dos décadas. Todos contra el MAS es la consigna y si así se tiene definido es porque cada uno por su cuenta, solita su alma, considera que no tiene con qué enfrentar al partido azul, independientemente de quienes vayan a ser sus candidatos.
El valiente del nuevo escenario parecía ser Manfred Reyes Villa que decidió llevar adelante su candidatura con su propio partido y sus propios candidatos a senadores y diputados, sin tratar de buscar alianzas forzadas que suelen servir para después, no para antes de las elecciones. Resulta que, en las últimas horas, el alcalde cochabambino ha anunciado que para hacer campaña no renunciará a su cargo, que sólo pedirá licencia. ¿Ya le llegó también a él el temor al monstruo masista?
En medio de este precipitado desmadre proselitista, en el que incluidos Branko Marinkovic y Chi Hyung Chung saben que sus techos en las preferencias están por llegar a su límite, emerge la figura de un campesino cocalero de nueva generación, algo así como un quechua-fashion que tiene la cabellera recortada y rapada a los lados cual si fuera futbolista de la Premier inglesa y que ha aparecido en vallas publicitarias con fotografía de vocalista cantamañanas, el hashtag “unidad ante todo” con un mensaje principal que dice “Andrónico bicentenario”, al que alguna mano invisible con conocimientos de estrategias de campaña está posicionando como el candidato no candidato. En esa ambigüedad, en esa indeterminación, si se quiere en la tibieza de sus maneras se está intentando instalar al presidente del Senado como la figura-bisagra para reunificar al MAS-IPSP y de esa manera agarrar vuelo hacia el 17 de agosto.
El diablo no sabe para quién trabaja. El caudillo Evo engendró a Andrónico al nombrarlo tercer hombre al comenzar la marcha del MAS el pasado año. Quería forzarlo a la arremetida para acortarle el mandato al presidente Arce y en ese momento el joven cocalero demostró que podía enojarse abandonando la travesía para no volver y afirmar categóricamente que no es ningún golpista. A partir de ese momento, el evismo se partió. Empezaron a surgir las voces de proclamación con “Andrónico presidente”, quien por ahora solo muestra astucia y les viene pegando por igual a Evo, del que no termina de destetarse al reafirmarse como orgánico, y al presidente Arce, para significar que él nada tiene que ver con el achacado fracaso gubernamental presente.
Si finalmente Andrónico Rodríguez termina convirtiéndose en opción electoral, optando el MAS por el mismo método de encumbramiento con el que se endiosó a Evo Morales, no nos quejemos: En la próxima década podríamos tener un nuevo caudillo que otra vez podría meternos en graves problemas de viabilidad política como en su momento lo hicieron Paz Estenssoro, Banzer y Evo Morales.
Debido a la muerte de su esposa (2012), Julio Grondona, presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) durante 35 años, decidió dejar de usar un anillo con una inscripción que decía “Todo pasa”. Manifestó entonces que eso era prácticamente lo único en su vida que no volvería a suceder: el compartir el día a día con la señora que lo dejó viudo.
“Todo pasa” es una frase mafiosa. Algo así como un axioma que se cumple de todas maneras en sentido de que no hay vuelta atrás y eso, en el territorio de las triquiñuelas, ayuda enormemente a que la impunidad se convierta en fortaleza institucional en un mundillo donde la coordenada ganar/perder tiene cada vez más que ver con la circulación de cientos de millones de dólares de una industria en la que los derechos de televisión crecen progresiva y geométricamente, mientras las casas de apuestas tienen la potencia para inducir a amaños de partidos en los que llegan a participar algunos futbolistas igual de inescrupulosos que sus patrones.
Esta es, respetables aficionados, aficionadas y aficionades, la verdad de la milanesa en la frenética industria del fútbol del siglo XXI y en ese frenesí, hay realidades futbolísticas poderosas por el dinero, prolíficas por la conversión de diamantes en bruto en verdaderas joyas del juego (canteras organizadas y trabajadas hasta el mínimo detalle), y tan artesanales como mediocres en las que el “Todo pasa” de Grondona se utiliza a rajatabla todos los días. A esta última categoría pertenece el fútbol boliviano en el que la improvisación y las malas artes dominan su identidad.
El jugador del Club Aurora, Diego Montaño, se llama en realidad Gabriel, y no tiene 19 años, sino 25. Falsificó su identidad inducido por algún genio que lo ayudó a quitarle seis años a su verdadera edad, probablemente para poder ser convocado a selecciones juveniles con la ventaja deportiva que supone una contextura física engañosa tal como sucedía en los años 90 de la Academia Tahuichi, cuando su prócer, Rolando Aguilera Pareja, decía que era más importante la patria chica que la patria grande y alguna vez, endiablado de rabia, —lo dominaba un temperamento muy sanguíneo—, no tuvo mejor idea que orinar en una maceta del antiguo edificio del parlamento boliviano.
La práctica de alterar edades para equiparar físicamente a nuestros menudos y frágiles futbolistas con los del vecindario sudamericano era entonces un secreto a voces. De esta manera teníamos que jóvenes promesas de la pelota aparecían con documentos de haber cumplido entre 12 y 15 años, cuando en realidad ya tenían por lo menos entre 16 y 19. Dicha ventaja deportiva ayudó a Tahuichi a brillar competitivamente en el concierto sudamericano durante los años 90 y de esta manera pudo ganar varios “Mundialitos Paz y Unidad”. ¿Pruebas? Una sola para sustentar esta versión: Una figura de la selección boliviana de fútbol que participó de la Copa del Mundo Estados Unidos 94 le preguntó alguna vez al seleccionador Azkargorta si quería saber su edad real o la “edad Tahuichi”. Esa práctica extendida en el más importante semillero del fútbol boliviano era comentada en voz baja en los malolientes pasillos de la componenda futbolera.
Con estos antecedentes, no tiene por qué sorprendernos lo de Diego-Gabriel Montaño, empeñado por ahora, en eximir de responsabilidades al presidente de Aurora y a su esposa que funge como apoderada del futbolista, de los delitos cometidos que podrían significarle una condena a tres años de privación de libertad: falsedad material, falsedad ideológica y uso de instrumento falsificado. Las consecuencias para el deportista podrían dar lugar a la prematura finalización de su carrera, pero muy probablemente no sucederá lo mismo con el presidente del club, Jaime Cornejo y para su señora esposa, Sandra Valencia. Valga subrayar que la familia Cornejo Valencia podría ser considerada, cuando menos, como muy especial: La hija de los capataces del cochabambino “equipo del pueblo”, Alejandra, matrimoniada con otro futbolista, René Barbosa, descargó insultos racistas en abril de 2022 contra el afro ecuatoriano Kevin Mina que entonces vestía la camiseta de Guabirá de Montero.
Todo pasa. Probablemente todo pasará para la familia empresarial Montaño Valencia. Como pasó sin que se supiera públicamente que un prominente dirigente de uno de los grandes del fútbol boliviano, bastante pasado en copas, le confesara a este periodista que alguna vez había comprado los servicios de un árbitro para que su equipo ganará un partido de Copa Libertadores. Todo pasa para el futbolista al que en pleno vestuario, dirigentes e hinchas agarraron a golpes en el estadio de Villa Ingenio. Continúa en su club. Está convocado a la selección. Todo pasa en el fútbol boliviano, pero en realidad, vistas las cosas desde las despobladas graderías de nuestros estadios y desde la comodidad de los sofás frente a nuestros televisores, no pasa nada y seguirá sin pasar nada. Julio Grondona que estás en el cielo, santificado sea tu nombre.