Encuesta FES: El 52% de jóvenes está insatisfecho por cómo funciona el sistema democrático del país
La fundación Friedrich Ebert Stiftung realizó este año la encuesta “Juventudes: Asignatura pendiente” en 14 países de América Latina. La juventud boliviana también se manifestó sobre la situación del país y su economía personal
Jóvenes de La Paz durante una feria de empleos. Foto: Archivo
La encuesta “Juventudes: Asignatura pendiente” de la fundación Friedrich Ebert Stiftung (FES) revela que la juventud boliviana está insatisfecha con el funcionamiento de la democracia, la situación del país y con su economía personal.
La entidad realizó este año la encuesta para explorar la relación de las y los jóvenes de 14 países de América Latina y el Caribe con la política, el ejercicio efectivo de sus derechos políticos y sus nociones democráticas.
Los resultados indican que el «52% de las y los jóvenes está entre algo y muy insatisfecho por cómo funciona el sistema democrático. Un 39% se ubica justo a la mitad entre la satisfacción e insatisfacción y sólo un 9% está entre algo y muy satisfecho».
En el caso de Bolivia, los resultados “generan una demanda de políticas públicas propias de un Estado de Bienestar que atienda las necesidades económicas, de empleo y de lucha contra la pobreza. Aunque las y los jóvenes no muestran un alto interés en la política ni una gran confianza en las instituciones democráticas, mantienen la esperanza de que su voto puede ser el medio para mejorar la situación del país”.
La situación económica propia es otra de las causas de insatisfacción de los jóvenes. De hecho, el 51% de las y los jóvenes no está contento con su vida en cuanto a lo económico.
«El 59% de las y los jóvenes están entre muy poco y poco satisfechos con el estado actual del país. No obstante, este porcentaje comparado con otros países de la región revela que esta relativa insatisfacción no es de las más altas entre los países encuestados».
Encuesta
En materia de ideología política, aproximadamente el 60% de los jóvenes se identifican con el centro, mientras que el 20% se inclina hacia la izquierda y el 20% hacia la derecha.
Además, y con algo más de la mitad de la población juvenil satisfecha, se encuentra la educación. «Cabe resaltar que, para esta categoría, mientras más alta sea la clase social, también lo será la satisfacción con la educación recibidas».
En este sentido, mientras que para las clases sociales “muy alta” y “alta” el porcentaje de personas satisfechas alcanza el 64%, en la clase media es del 56% y para las clases “media-baja” y “baja” las personas satisfechas con su educación no superan el 46%.
Esta misma dinámica es evidenciable con la salud, que ocupa el tercer puesto con un 52% de las y los encuestados que reportan estar satisfechos en esta área.
En otra categoría, la encuesta se ocupa de la satisfacción que tienen las y los jóvenes con su vida propia. Si asumimos que la satisfacción con la vida propia es producto de las circunstancias económicas, sociales y relacionales, entonces las categorías previas (política y social) son las que generan y aumentan la satisfacción en la vida de las y los encuestados.
“Adicionalmente, en comparación con el resto de los países encuestados, Bolivia tiene la menor cantidad de jóvenes satisfechos con su vida (44%); y la mayor cantidad de juventud muy poco satisfecha con su vida propia, alcanzando un 12% de las y los encuestados (21% si consideramos a los muy poco y poco satisfechos)”, explica parte del informe.
Lea más: Encuesta de Celag dice que el 58% cree que no hay líder opositor capaz de ganar al MAS en 2025
Desconfianza
Los hallazgos indican que, aunque los jóvenes están relativamente más satisfechos con aspectos privados de su vida, manifiestan una profunda insatisfacción con la situación del país, el funcionamiento de la democracia y su propia situación económica.
El documento concluye, además, que la juventud boliviana, a pesar de su insatisfacción y desconfianza en las instituciones, mantiene el interés y la esperanza de que su participación política, en especial mediante el voto; pueda ser el motor de un cambio positivo. Y, finalmente, si bien se ha avanzado en los derechos políticos tanto por el lado de la votación en elecciones como la posibilidad de ser electo como autoridad nacional; queda pendiente el fortalecimiento de los mecanismos para que las y los jóvenes puedan participar en política.
La encuesta se aplicó a cerca de 22.000 jóvenes en 14 países de la región a través de la metodología de paneles web. Esta encuesta estuvo a cargo de la empresa YouGov.
Participaron Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Honduras, México, Panamá, Perú, República Dominicana, Uruguay y Venezuela.