¿Sabía que este Todos Santos marca el inicio de un nuevo ciclo? Culturas lo explica
La festividad de Todos Santos no es solo el tiempo de recibir a las almas de los difuntos, también implica un cambio profundo.

Todos Santos se conmemoró este 1 y 2 de noviembre. Foto: APG.
Además de traer consigo la visita de las “almas” de los difuntos, Todos Santos envuelve un sentido de cambio profundo. Así lo explicó este domingo el viceministro de Cultura, Juan Carlos Cordero, que dijo que con Todos Santos llega también un nuevo ciclo.
“Existen encuentros de diferentes tipos, vamos a hablar del encuentro de los tiempos; por ejemplo, del Pacha, estamos en un tiempo del awtipacha, que es el tiempo de la sequía, y Todos Santos nos encuentra y nos lleva al tiempo del jallupacha, que es el tiempo de la lluvia”, explicó el viceministro, en Bolivia TV.
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La autoridad indicó que esto es un retrato mismo del ciclo de la vida. Mientras las familias recibieron a las “almas” de sus difuntos el 1 y 2 de noviembre, llega el tiempo nuevo para la tierra.
“Ése es el primer encuentro fundamental, porque eso significa el ciclo de la vida permanente, sobre el cual el pueblo andino, el pueblo indígena ha estado viviendo la necesidad de los cambios de la sequía a la lluvia, que no hay nada malo en eso, son simples complementariedades”.
TODOS SANTOS
Un ritual profundo envuelve esta creencia. El paso hacia la vida que llega con las lluvias, es también acompañado por una tradición musical, que, al igual, pasa por una transición en esta época de Todos Santos.
“El otro encuentro es entre la vida y la muerte; la vida, el sonido que se reproduce en este tiempo es el q’iwa, empezamos a tocar el almapinkillo, un sonido agudo, en contraposición a las cañas que estaban dominando antes, los kantus, las zampoñas. Dicen que ese sonido trae la lluvia; si ustedes recuerdan, el sonido q’iwa es el sonido de los niños, del llanto de las mujeres, y la vida nace con el llanto del niño; es una energía”.
Cordero detalló que cuando no hay lluvias, en algunas regiones como el norte de Potosí, se acostumbra a pedir las oraciones de los niños, para que su voz, ese sonido dulce y agudo, venga la vida que éstas traen.
“El tercer encuentro es el de nuestras pachas”, expresó la autoridad, al referirse a la conflagración de lo conocido como los niveles de existencia, las territorialidades.
“Y finalmente, es el encuentro con nuestra memoria, porque Todos Santos nos recuerda de dónde somos, quiénes somos, hacia donde vamos. Una permanente presencia del pasado y el futuro conviviendo juntos; la memoria viviendo en nosotros. Como dicen los Principios del Vivir Bien, nosotros vemos el pasado para caminar hacia el futuro, todo va en sincronía”, puntualizó.
Con Todos Santos comienza el ciclo fértil del calendario agrícola: los frutos están germinando y los animales (ovejas, llamas, alpacas, vacas) están en estado gestante.