Corte Suprema de EEUU debate destino de niños indígenas apartados de sus familias
La decisión de la Corte será analizada atentamente porque, más allá del caso de los niños, podría tener "consecuencias revolucionarias" para las tribus nativas, según Singer.
La Corte Suprema abordaba el destino de los niños nativos estadounidenses huérfanos o separados de sus padres.
Imagen: AFP
La Corte Suprema de Estados Unidos abordaba este miércoles el destino de los niños nativos estadounidenses huérfanos o separados de sus padres, un caso delicado que probablemente tendrá graves repercusiones para sus tribus.
Al igual que en Canadá, Estados Unidos ha separado masivamente a estos niños de sus padres biológicos durante décadas para colocarlos en internados o familias no nativas, aislándolos de su cultura indígena y sus raíces tradicionales.
En 1978, el Congreso estadounidense puso fin a estas políticas de asimilación forzosa con la «Ley de Bienestar del Niño Indio» (ICWA, por siglas en inglés). Esta ley establece normas para separar a los niños nativos de sus padres y prevé que sean colocados o adoptados, con carácter prioritario, en familias de su tribu.
El estado conservador de Texas -sur de Estados Unidos- y las familias a las que se les impidió adoptar a algunos de estos niños han emprendido acciones legales en nombre de la 14ª enmienda a la Constitución, que prohíbe a los legisladores diferenciar entre ciudadanos sobre la base de criterios raciales.
Le puede interesar: El referéndum sobre el aborto en Kentucky resulta en un nuevo revés para los republicanos.
«La ICWA viola la garantía de protección igualitaria establecida en la Constitución al categorizar a los niños según su genética y ascendencia y a los posibles padres adoptivos según su raza», señala el documento presentado.
Varias tribus indígenas locales, con apoyo del gobierno del demócrata Joe Biden o de la poderosa organización de derechos civiles ACLU, han replicado que la ley no se basa en criterios raciales sino políticos, de pertenencia a entidades soberanas.
Las tribus nativas tienen un estatus especial en la ley estadounidense, con sus propios poderes y autoridades.
Después de decisiones judiciales mixtas, la Corte Suprema accedió a intervenir en el caso y así oirá los argumentos de ambas partes el miércoles y tomará su decisión la próxima primavera boreal.
En el pasado, muchos de sus nueve miembros expresaron escepticismo sobre la ley, pero se sabe que uno de sus jueces conservadores, Neil Gorsuch, apoya los derechos de los nativos junto con los integrantes de tono progresista.
La decisión de la Corte será analizada atentamente porque, más allá del caso de los niños, podría tener «consecuencias revolucionarias» para las tribus nativas, según Joseph Singer, profesor de derecho en la prestigiosa Universidad de Harvard.