La cumbre sobre el clima en la ONU no consigue planes concretos
La falta de anuncios concretos y significativos de los países más contaminantes, como China e India, campeones de la energía solar y eólica, pero que devoran carbón, enojó a ambientalistas.

“¿Cómo se atreven?”, lanzó indignada y llorosa la joven activista sueca Greta Thunberg en una cumbre sobre el clima en Nueva York que no colmó las expectativas. El jefe de la ONU, Antonio Guterres, pidió planes más concretos a países y empresas.
El apasionado discurso de la adolescente de 16 años fue el momento clave de la cumbre, llamada por el jefe de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para revigorizar el Acuerdo de París sobre el clima.
Un total de 66 países, 10 regiones, 102 ciudades y decenas de empresas se comprometieron a alcanzar la neutralidad en carbono para 2050, dijo Guterres. Y varios países se comprometieron a plantar más de 11.000 millones de árboles. “Pero aún tenemos un largo camino que recorrer. Necesitamos planes más concretos, más ambición de más países y más empresas”.
Pero la falta de anuncios concretos y significativos de los países más contaminantes, como China e India, campeones de la energía solar y eólica, pero que devoran carbón, enojó a ambientalistas.
“Esta cumbre debía ser un punto de inflexión. Pero hemos visto una falta excepcional de compromiso de los países más ricos y contaminantes que siguen adoptando medidas triviales para resolver una crisis que es de vida o muerte”, dijo Harjeet Singh, jefa para el clima de ActionAid.
Los científicos creen que el alza de la temperatura debe ser limitada a +1,5ºC en relación al siglo XIX para prevenir una catástrofe climática. La ONU alertó que la temperatura mundial promedio de 2015 a 2019 va camino a convertirse en la más alta de cualquier periodo de cinco años jamás registrado.
La Tierra ya es 1ºC más calurosa que en el siglo XIX, y si las cosas siguen igual, será por lo menos 3ºC más calurosa en 2100.
Las promesas de ayer no tienen valor legal. Son un trampolín hacia la reunión COP25 en diciembre en Chile y la COP26 a fines de 2020 en Glasgow, cuando los países deben entregar a la ONU sus compromisos sobre el clima revisados al alza.
Al día de hoy, 59 países de los 195 países firmantes del Acuerdo de París anunciaron su intención de hacerlo, pero Estados Unidos no es uno de ellos. “Yo no debería estar aquí, yo debería estar en la escuela, del otro lado del océano”, manifestó Thunberg, el nuevo rostro de un movimiento mundial de jóvenes que puso el viernes en las calles a millones de personas para exigir acciones urgentes sobre el clima.
“Han robado mis sueños y mi niñez con sus palabras huecas (…). Estamos en el comienzo de una extinción masiva, y de lo único que ustedes pueden hablar es de dinero y cuentos de hadas de crecimiento económico eterno. ¿Cómo se atreven?”, preguntó.
regaños. Thunberg y otros 15 niños y jóvenes denunciaron ayer la inacción de cinco países, Francia, Alemania, Argentina, Brasil y Turquía, como una violación de la Convención de Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño.
Uno tras otro, los líderes mundiales subieron al podio para decir que la situación es grave, pero en general no hicieron anuncios concretos y representativos.
El primer ministro indio, Narendra Modi, no indicó explícitamente si su país mejorará los compromisos realizados en 2015 bajo el Acuerdo de París, aunque afirmó que trabaja para más que duplicar la energía renovable.
Tampoco hubo nuevos anuncios de China, el mayor emisor de gases contaminantes del mundo. El canciller Wang Yi habló de la necesidad de multilateralismo, y criticó veladamente al presidente Donald Trump por sacar a Estados Unidos del Acuerdo de París.
Varias organizaciones ambientales expresaron su frustración.
“Creo que el grito apasionado de Greta pidiendo más sensatez y escuchar y actuar en base a la ciencia fue ignorado”, mencionó a AFP la jefa de Greenpeace International, Jennifer Morgan.
Menos de la mitad de los 136 líderes que desde ayer participarán en la Asamblea General de la ONU acudieron a la cumbre.
Trump, que no tenía previsto asistir, hizo una aparición sorpresa, y se sentó unos minutos en la gran sala para escuchar el discurso del primer ministro indio.
Otro gran ausente fue el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, bajo cuyo gobierno la Amazonía continúa quemándose a ritmo récord, y el primer ministro de Australia, Scott Morrison, cuyo gobierno persigue agresivamente una agenda favorable al carbón.
Laurence Lubiana, una de las arquitectas del Acuerdo de París, de 2016 expresó que “ni India ni China dijeron nada”. Greenpeace, la ONG FIMA y jóvenes activistas por el medio ambiente chilenos opinaron que el presidente de su país, Sebastián Piñera, estuvo “lejos de la ambición que demostraría un verdadero líder climático”.
Piñera señaló que Chile avanza hacia “la descarbonización total de su matriz energética”, pero los activistas lamentaron que no anunciara su cierre para 2030.
Desde el Vaticano, hasta el papa Francisco deploró los compromisos “muy vagos” de los países desde hace cuatro años.
Antes de la cumbre, una reunión permitió desbloquear $us 500 millones adicionales para la Amazonía y otras selvas tropicales, en ausencia de Brasil, “el elefante en la habitación”, según el presidente francés, Emmanuel Macron, que invitó a la cita a los presidentes de Chile, Colombia y Bolivia.
(24/09/2019)