Chip cerebral promete cambios positivos en la calidad de vida de pacientes
La empresa Neuralink busca mejorar la calidad de vida de personas con trastornos neurológicos como la Esclerosis lateral amiotrófica (ELA) y el Parkinson.

Neuralink, de Elon Musk, podrá probar su chip cerebral para mover brazos robóticos. Foto: RRSS:
Neuralink, la empresa de neurotecnología fundada por Elon Musk, anunció que implantó con éxito un chip cerebral en humanos, abriendo nuevas posibilidades para personas con discapacidades neurológicas.
La compañía desarrolló un chip cerebral llamado N1, que busca controlar dispositivos electrónicos con el pensamiento, señala la empresa en su sitio web.
Según Elon Musk, el principal objetivo de Neuralink es mejorar la calidad de vida de personas con trastornos neurológicos como la Esclerosis lateral amiotrófica (ELA) y el Parkinson, entre otros.
El chip cerebral controlado por el pensamiento
El chip es un dispositivo diminuto, de 8 milímetros de diámetro, que contiene 64 hilos ultrafinos. Estos hilos son tan delgados que se comparan con el tamaño de las neuronas del cerebro o la décima parte del grosor de un cabello humano.
Según la empresa, propiedad de Elon Musk, la implantación del chip se realizó mediante una cirugía por un robot especializado, ya que los hilos del dispositivo son delgados y no pueden ser insertados por la mano humana.
Una vez implantado, el chip puede registrar las señales eléctricas del cerebro y transmitirlas de forma inalámbrica a una computadora que permitirá el control de dispositivos externos, como teléfonos y computadoras, solo con sus pensamientos.
Musk también mencionó que, en el futuro, la tecnología podría restaurar el habla y la memoria, permitiendo una comunicación más rápida y eficiente.
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Pruebas en humanos
En mayo de 2023, la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) autorizó a Neuralink a realizar experimentos en humanos.
Neuralink no es la única empresa que trabaja en interfaces cerebro-computadora (BCI). Más de 200.000 personas en todo el mundo ya utilizan algún tipo de BCI por motivos médicos, como implantes cocleares para personas sordas y dispositivos para prevenir ataques epilépticos