Australia pide cazar a tiburón en extinción
Norma. La medida es del Gobierno y va en contra de un estatuto protector mundial

La mala reputación que se ganó el tiburón blanco tras sus últimos ataques mortales en el estado de Australia occidental será su perdición, pues el Gobierno ordenó su caza a pesar de ser una especie al borde de la extinción.
Australia occidental, con el estigma de ser considerado uno de los lugares más peligrosos del mundo por los ataques de tiburones, decidió crear en las playas de Perth y la región de Margareth River dos franjas de seguridad de un kilómetro para que los pescadores profesionales inicien la cacería de este animal marino que mide más de tres metros de largo.
Las franjas de seguridad contendrán redes y cebos denominados “drum lines” (líneas de tambor), una técnica que mata indiscriminadamente a otros tiburones considerados no letales y especies como tortugas, delfines y focas.
La caza fue ordenada a finales de diciembre por el mismo Gobierno, después de que un tiburón blanco acabara con la vida de un surfista en una playa de Margareth River, a 270 kilómetros al sur de Perth.
“La seguridad de la vida humana y los bañistas están primero”, sostuvo el presidente del gobierno de Australia Occidental, Colin Barnett, para defender una medida que atenta contra el estatuto de protección del que goza el tiburón blanco en ese país y el mundo.
El ministerio ambiental de Australia calculó en 1990 que quedan 10.000 ejemplares de dicho animal, por lo que fue incorporado a la lista de especies protegidas, al igual que la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.